El genocida y criminal de lesa humanidad Daniel Ortega envió bajo investigación a la presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Alba Luz Ramos, pero hasta el momento se desconoce si está encarcelada o bajo casa por cárcel.
La cacería de brujas en la Corte Suprema de Justicia continúa al asecho, pues aparentemente la dictadura Sandinista quiere volarle la cabeza a la presidenta de esa institución, luego de más de 30 años al mando de la estatal.
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Según información de medios nacionales, la funcionaria sandinista cómplice de a pareja genocida, fue sacada de las oficinas de la CSJ por policías vestidos de civiles con rumbo desconocido para ser interrogada.
El operativo fue dirigido por el comisionado general en retiro, Horacio Rocha, quien funge actualmente como asesor presidencial de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Ramos está siendo investigada luego de la defenestración de 6 aliados que fueron acusados por “Conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional” conocido como “traición a la patria”.
Los acusados son los exasesores de la presidenta de la CSJ, el vocero de la institución Roberto Larios; los asesores María José Camacho Chévez y Moisés Astorga, y Hans Camacho Chévez, quién se desempeñaba como responsable de informática del Tribunal Nacional Laboral de Apelaciones y también hermano de María José.
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El circulo de confianza de la presidenta de este poder del Estados fue descabezado por la dictadura, pues recientemente también se conoció la destitución del secretario administrativo de la corte Berman Martínez, quien cayó en desgracia por supuesta malversación de fondos para financiar actividades de adiestramiento a paramilitares en contubernio y bajo la dirección de los magistrados Marvin Aguilar y Juana Méndez.
La dictadura Sandinista continúa desarticulando las bases en la CSJ de quienes hablen en contra del gobierno.
