La dictadura sandinista de Daniel Ortega y Rosario Murillo continúan con su redada contra religiosos de la iglesia católica, ahora en el sector de Managua.
Este jueves 28 de diciembre se conoció sobre el arresto del Monseñor Carlos Avilés, Vicario General de la Arquidiócesis de Managua quien en años anteriores ha denunciado la persecución y crímenes cometidos por la pareja de dictadores, así como las mentiras expuestas por los Ortega Murillo al decir que en Nicaragua «hay libertad religiosa».
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Recientemente la sancionada policía sandinista detuvo al obispo de Siuna, monseñor Isidoro del Carmen Mora Ortega; al Vicario General de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Óscar Escoto Salgado; al padre Jáder Guido, segundo vicario de la catedral de Matagalpa; y a Monseñor Pablo Villafranca de la parroquia Nuestro Señor de Veracruz en Nindirí, Masaya, respectivamente.
Todos se encuentran tras las rejas y la lista continúa en aumento, tras su intento por desaparecer a la iglesia católica del país.
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Los dictadores Ortega Murillo han girado la orden a los líderes religiosos, laicos y sacerdotes de la iglesia católica, evitar mencionar el nombre de monseñor Álvarez en sus sermones, de lo contrario, «irán directo a una cárcel».
