Policía secuestra a tercer seminarista y otro sacerdote se exilia

En los primero tres días del 2024, la dictadura sandinista encarceló a otro seminarista y un sacerdote de la Arquidiócesis de Managua fue obligado al exilio ante la ola represiva desatada por los Ortega Murillo.

El tercer seminarista detenido es Francisco Castiblanco de la Diócesis de Jinotega, quien fue secuestrado por Policías y paramilitares al servicio de la pareja criminal de lesa humanidad.

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Mientras que el sacerdote obligado al exilio es Fernando Téllez Báez, de la Arquidiócesis de Managua, debido al hostigamiento orquestado por el régimen sandinista a pastores de esa diócesis al encarcelar a al menos siete de sus integrantes.

En el caso de Téllez Báez, él estaba a cargo de la parroquia Nuestra Señora de las Américas en Managua. El templo cerró sus puertas por varios días, por lo que feligreses presumían que el padre Fernando fue secuestrado por la sancionada Policía Sandinista al igual que sus otros compañeros de la Diócesis de Managua, sin embargo, se dio a conocer que decidió el exilio antes de caer en las garras de la dictadura.

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Un total 84 de sacerdotes de la Iglesia católica se encuentran fuera de su patria por órdenes de los caudillos Ortega Murillo, de estos, 12 religiosos fueron desterrados, 34 fueron obligados al exilio, y a otros 24 no los dejaron entrar al país.

Con el secuestro del seminarista Francisco Castiblanco, ya sumarían 18 los religiosos detenidos al cierre del 2023 e inicios del 2024.

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