La administración del presidente Joe Biden expresó este lunes su oposición a un proyecto de ley propuesto por los republicanos en la Cámara de Representantes que busca endurecer las leyes que prohíben a los inmigrantes ilegales votar en elecciones federales. Según la Casa Blanca, esta legislación es innecesaria y podría complicar el proceso de votación para los ciudadanos estadounidenses.
La iniciativa, denominada Ley de Salvaguarda de la Elegibilidad del Votante Americano (SAFE Act, por sus siglas en inglés), requiere que todos los votantes presenten prueba de ciudadanía antes de emitir su voto en elecciones federales. Asimismo, obliga a los estados a eliminar a los no ciudadanos de sus registros de votantes y establece penas de hasta cinco años de prisión para los funcionarios electorales que inscriban a no ciudadanos.
«La Administración se opone firmemente al HR 8281», indicó la Casa Blanca en un comunicado. «Ya es ilegal que los no ciudadanos voten en elecciones federales. Este proyecto de ley se basa en falsedades y no proporcionará una protección adicional a nuestras elecciones. En cambio, dificultará que los estadounidenses elegibles se registren para votar y aumentará el riesgo de purgas incorrectas en las listas de votantes.»